Pero, y aqui cayo el moco al atole.... esta bien bueno hasta su puta madre y huele a sexo me cai de a madres.
Yo tengo mi jaina y no puedo perder el todo por una aventura de ver si el wey es o no es, y si lo fuera, por cuanto tiempo duraría, pero... estar a dieta no impide ver el menú.
Este wey me prestó su rosario un domingo que estaba muy triste, precisamente una vez que me rescató en la cocina, me solté a moco tendido, pues si estaba muy triste pero... lloré en su pecho, no huele, apesta a sexo, fue un sentimiento encontrado y lo maneje dentro de mi locura. esa vez me prestó su rosario, se lo quitó de su pecho peludo y perfumado, (peludo porque diario anda sin camisa y desabotonado, el wey es tipo barrio y prendidon), y le dije que se lo devolvía el jueves que tenía cita en psiquiatría.
El martes de esa semana me fui al bots y sudando y todo empezó (como genio liberado, me cai de a madres, como en el "nick at nigth" que sale mi bella genio cuando menos lo desea el coronel) ah, decía que empece a sudar y su olor de su rosario empezó a salir y claro, ai va la puta verga engañadora a traicionarme y haciendo ejercicio, dando putazos y todo, claro, con la chola parada y en pants, nooo ps a toda madre.
El domingo, es decir hace dos días, me habló, estaba hasta su puta madre de trabajo, me valió bertas.
Él andaba confundido y con la autoestima muy rara, ni bien ni mal pero rara, en resumidas cuentas necesitaba que yo le confirmara que la gente le esta mintiendo, que él no esta delgado ni adelgazando
— A ver wey, súbete la camisa
Pos se la subió y haciendo un esfuerzo por conservar la mirada de "doctor internista" ví que sí, que tenía su pancita ai buen puesta, que no estaba delgado, que se le veía su papada empezando a hacerse.
No le comenté nada de que estaba bien malo, era un momento suyo y para él y no se lo iba a robar, yo... para después.
Le dije que juntos vamos a salir de esta bronca, que le voy a regalar mi Protevit que a mi me hizo daño pero que con eso se va a poner bien puerco. Reimos juntos, aunque yo hice más esfuerzo para hacerlo, andaba muy golpeado del estomago, luego, con su camisa abierte (notese tono del pelón Bermudez), sus pelos de fuera, una sonrisa amplia se descolgó su rosario, rápido me descolgué el mio, sorteando la traba del gafete de empleado y juntos nos cambiamos el rosario de nuestros cuerpos, el suyo aun sigue oliendo a si mismo, a su cuerpo y su perfume que se pone desnudo sobre su cuerpo y casualmente esas gotas caen en ese rosario que hoy traigo yo.
Cuando nos lo cambiamos, el paliacate que usamos en la calle pa que no nos tumbe el sol, se muto en un rosario, luego nos abrazamos y mi pelvis tuvo que hacer hacia atrás, mi pene ya estaba erecto. Eso fué el otro día
Hoy, con todos los cuidados me lleve la lata de Protevit en mi mochila, la protegí de más porque estaba lloviendo desde que salí de mi cantón hasta llegar al jale, la lata de Protevit no recibió ni una sola gota de agua, ¿es que acaso esa lata no era de polivitaminicos sino... de unas rosas espolvoreadas de rocío, como de esos mecos que te caen en el pecho?
Le llamé a su extensión, nos vimos y me platicó y me dijo que fue y que vino, que va y que viene y que en el camino se entretiene, que hoy no lloró y que comió espinazo y que no le hizo daño, que arregló unas fotos y que cuando quiso llorar no le vió sentido al verse dentro de una casa, propia y con su hija jugando y con otras dos en la escuela
— Y tú como estas chaparro?
Chaparro, tengo apodo, que acaso me quiso decir "kiubas puto, ¿jalas? que la traigo afilada", o acaso sí me lo dijo como tan solo un afectuoso apodo, chaparro, y si no hubiera sido ese mi apodo ¿que otro hubiera sido?
— Y tú como estas chaparro?
— Ah, yo bien, háblale a tu "gastro" y dile que vas a tomar esa mierda, ponle agua en vez de leche, vámonos a trabajar que ya nos han de estar extrañando
Rápido vaKero, largate de aquí, el aire de la lluvia que viene esta soplando y me esta llegando su perfume que escaldaría mi lengua y me la dejaría amarga, revuelta entre sabe que perfume, un pelo que me traiga de una lamida atragantandoseme en el gaznate y el sudor que traiga el perro del periférico al centro dentro de su vocho.
Recado para Juan: (y para limpiar mis culpas)
Quiero que sepas y de nuevo refrendarte todo mi amor, que aunque te estés cargando un puto genio de la chingada (gracias a que me estas soportando mis noches febriles) te sigo amando y él no significa nada, si me aparece el deseo por otra persona es tan solo carnal y no pasará de la infiel puñeta que a todas las parejas interfiere sin hacer más pedo
8=======Ð
No hay comentarios.:
Publicar un comentario