Que malos días

El martes pues ya viste que estaba malo, luego el miércoles no andaba tan bien, adicional, me di un tirito con mi tía
— Ay hijo, vete nomas que feo te ves, súbete esos pantalones, traes los calzones de fuera
— Tía, directo, no este molestando, hoy es miércoles y traigo el mejor pantalón que tenía años que no usaba, hoy es mi día de descanso y me siento muy bien, además, todos los días de jueves a martes voy disfrazado de oficinista, cosa que me caga
— No hijo, mira, de lunes a domingo yo me llamo "tía chismosa entrometida que nadie le pidió opinión", y si vamos a disfraces, hoy si vienes disfrazado
— Tía, no estoy ni en edad ni en humor ni de aguante de escuchar lo que todos los días me repite, ese es mi pedo, si es pasión que se le borre, si es tumor que se lo operen, poco puede hacer en la personalidad de alguien de 30 años.
Para esto, mi mamá con cara de "ya valió pirrin", y mi vato que le caga la madre estar oyendo todo mi verbo.
Pues agarramos nuestros triques y fuimos a buscar una pieza que tenía jodida la pinche nave, ese carro nos esta fallando mucho, de repente nos dicen...
— Miren, tomen este camión, se bajan en Av. Plan de San Luis y ahí les van a dar un mejor precio, ellos se dedican a eso
Pues córrele que ahí viene el camión, saco mi boleto de prepago y primero se sube mi vato y luego yo; me dice el pendejete del camionero mendigo jodido...
— Pues yo no acepto estos boletitos
— Mira, ustedes estuvieron parando toda la ciudad para que aumentaran el costo del pasaje, el Gobierno les regala el papel y todavía me dices que en particular, ¿TÚ no los quieres?
— Es que no me los aceptan
Me calle y me pase, yo quise pagar y no acepto, de repente frena el camión a lo culero y me dice
— Ah, entonces no vas a pagar
Todo el camión chutandose el pedo
— Pues no, es lo único que traigo, ¿lo quieres? tómalo
De repente, llega mi querido novio, Juan, y paga, es decir, el discurso que me aventé valió verga. Agarro mis triques y me bajo en putiza del camión, Juan nomas se quedó con cara de "yo que hice", luego lo veo que se baja de inmediato, se va a la otra esquina y ya nos empezamos a dar un pinche agarrón de miedo, de por sí ya venía calientito
— Ya sabes cabrón que me emputa que hagas tus pinches numeritos
— Nadie te pidió que pagaras mi camíón, no es de que quieran o no los boletos, es que...
— No puedes vivir metiendo imposiciones
— Mira cabrón, no hables de imposiciones porque ellos pararon todo Guadalajara, el Gobierno, ratero puto y culero, lo que quieras, ai anda todo preocupado sacando camiones de por debajo de la tierra, la Sedena acuerdate wey, estuvo dando servicio y ahi ibas en la camioneta llena de wachos, camiones del DIF, porque estos culeros no quisieron invertir en la tarjeta de prepago, luego el Gobierno les regala papel e impresiones y llega este puto y me dice "fuchi", ya ni jodes.
— Yo no se, nomas ahora si ya nos chingamos porque ni tu ni yo traemos un peso
Efectivamente, nos fuimos caminando como treinta cuadras, pero no se le ocurrió sacar su billete de a $200 porque le da "pena" pagar con un billete grande
Ya la traíamos de malas.
Pos no comimos, llegamos a casa de mis papas y pues nomas sopita de arroz amarilla y birote.
Su billete ya lo cambio por uno chiquito y nos fuimos a casa, mucha hambre, y como andaba medio delicado del estomago, pues cenamos carnita asada sin nada de grasa y dos quesadillas muy delgaditas, él si se las hizo bien chonchas y hasta aguacate les puso, yo no podía comer más que carnita asada y dos quesadillas muy delgaditas.
De repente, timbran a la puerta, era Orlando, un amiguillo que vive en contraesquina...

Relato en putiza
Un día, sin avisar, me fui a la casa en el servicio de las 1110pm, cuando por lo regular me voy en el de la 0110am, además toco la suerte de que viviendo hasta la ñonga, para allá iba la camioneta primero, pues voy llegando a la casa, mi vato dejo la puerta abierta con todo y el cancel para dejar fuera toda sospecha, pero no imaginaba el tal Orlando, que nomas así a la de sin pedo, me voy apareciendo, se le vino un color y se le vino otro, a mi vato le valió madre, como no andaba en malos pasos, pues cero broncas, así conocimos a Orlando

Pues de repente timbran a la casa, era Orlando, que quería pistiar, pues ya empezaron a tequiliar mi marido y él, yo nomas con un jugo de naranja, Oh error, me puse malisimo, al rato se fue y me empece a poner peor, estaba evacuando bien culero.
Se dieron las 12:00am de la noche y las diarreas siguieron pero con dolor, ya no nos podíamos mover a ningún lado, no tenemos el carro. Le hable a la camioneta haber si nos hacía el favor de pasar porque un vecino que sale tarde, pues lo llevan y es el último
— Oye Chuy (el conducto de la camioneta del transporte del trabajo), ya salio Nacho (mi vecino)
— No mi vaKero, al rato vamos a ir para allá, ¿que pasa?
— Es que sabes que?, ando malo y tengo mucho dolor y no tenemos el carro
— Ah vaKero, esperate un rato, aguanta, ya bajó y vamos para alla, yo te recogo en la puerta
Pues tardo mucho, pasaban de las 0200am y no llegaba, mientras, nos arreglamos, vi la casa para todos lados y de repente me abraza mi Juan, mi Juan
— vaKero, no te estas despidiendo de la casa, te conozco y eso haces cuando te vas al hospital
Y voitelas que me pongo a llorar pero no feo, !culero!, son cosas que no resisto, la diarrea no me pega en el estomago, me destroza los nervios por algo que algún día les diré y que esta ligado al trauma post hospitalario
Bajo el dolor y le rellamamos al chavo de la camioneta y le dijimos que no iba a ser necesario, se lo agradecí hasta la madre, neto. La verdad es que sí me había bajado el dolor pero el colon lo traía de la chingada
Al día siguiente nos fuimos con el doctor, cero desayuno porque continuaba la diarrea, me ayudó mucho mi doctor y me recetó un antibiótico, unas capsulas que son regeneradoras de la flora intestinal, hagan de cuenta Yakult en capsulas sin leche; llegamos a casa de mis papas
— Hijo (me dice mi mamá) nos tenias muy preocupados, como estas?
— Bien mamá, espérame tantito, Juan me va a inyectar
— Que, que, que paso (dice mi abue) ahora de que estas malo hijo, tu diario estas malo, yo creo que no vas a oir los truenos de mayo
O sea, todo el animo arriba; la inyección duele de su chingada madre, aunque no tanto como las vitaminas
— Hijo, vente a desayunar, ya te lo hice y esta calientito
Despedí a Juan
— Mamá, ¿sí te dije que tengo diarrea?
— Sí, ¿que tiene de malo?
— Nada, pero no puedo comer chilaquiles mamá
— Ay hijo, ya vas a empezar
Los tiro de mal genio y me quiso decir algo que no pudo terminar de decirme porque entro mi hermana, y luego su chavito
— No te vas a comer la carne?
— Si mami, ai voy, pero tiene muchos gordos
— Uuuuy hijo, pues yo te los guarde porque los nervios te hacen mucho provecho
— ....
Me sentía muy mal, hable al trabajo con mi jefe al cual se le denominará "idiota", para futuras necesidades
— Oye Idiota (con mayúscula, no puede ser de otro modo), llamo para decirte que no puedo ir hoy a trabajar, te dije que desde el martes estaba malo y no me he podido arreglar
— ...
— Ya fui con el doctor pero no puedo retener todavía los alimentos
— Ah
— No tengo justificante médico, porque fui con mi doctor particular
— Que raro, ¿me decías que no tenías dinero?
— ...
— ...
— Yo espero que no halla problema contigo por mi ausencia
— Pues mira vaKero, tuvo que ser muy difícil tomar esta decisión de no ir a trabajar, porque ¿digo?, no porque tengamos una molestia, nos vamos a ausentar del trabajo
Ya no les digo más, y ahora saben porque en lo consecuente sera llamado "Idiota" . Colgué y luego le mente la madre.
Le pedí una lana a mi mamá y ahora sí me dice
— Hijo, tu y Juan no más, no vayas a salirte de ese circulo, no acepten invitaciones para esas cosas de Sodoma y Gomorra
Preocupada mi mamá porque la diarrea al igual que yo, la relacionan con el Sida, muy burda relación estúpida, pero fue lo que me enseñaron y no por nada en vez de psicólogo tengo psiquiatra que no se ha querido aventar el jale de una regresión.
Nos fuimos de casa de mis padres, no nos han entregado el carro y a pata pues fuimos a buscar pollo y verduras, es lo que he comido, cenado, desayunado y hoy comí lo mismo, el suero me tiene hasta la chingada, ya lo mete al refri, le doy unos sorbos pero ya estoy hasta la madre de esa agua salada
Ahora ya estoy en el trabajo, voy mejorando con rapidez pero estaré a dieta por 4 días, el pollo seco y las verduras cocidas no me saben a nada, no se nos ocurre más que comer y mi vato se disculpa mil veces pero con rigidez me pide que me coma todo.
Hoy me inyectó, me puse una toalla para cubrirme el agujero, como no compramos algodón, lo estamos haciendo con papel del baño y me estila el alcohol y luego me llega a mis guevitos o mi agujero y me arde "desuputamadre".
No se ha separado de mi ni un instante, me ama, me atiende, me acaricia con ternura, lo caliente no se le quita, le hice una ñeta y no se le bajaba, yo ahorita no quiero ni chingadas madres, es más, el hocico me apesta a madres, y no lo puedo ocultar con mentitas o clorets porque me irrita el estomago. Lo que sea, estoy triste y no puede ser menos, es que han sido malos momentos, malos días