lunes, 6 de noviembre de 2006

Todavía pago la desvelada

El viernes llegue a la casa y empeze a ver una pelicula que se llama "Perro callejero", con un "goey", que se llama Valentin Trujillo, a decir de dos tres escenas... que culazo de cabrón, luego, el sábado llegue a la casa y sopas... que iniciaba la segunda parte de la pelicula, me meti a la cama hasta como a las cinco de la mañana, y fue en esta segunda parte donde neta si llore un chingo, triste por la vida que lleva este cabron y la razita con la que se junta me fui a la cama, me abraze de mi vato
Mi vato— Que tienes?
yo— es que estuvo llorando en el final de la pelicula, se muere la chava de tanta heroina que se metio y le deja un chavito al "perro"
él— mejor ponte a resar un novenario
yo con cara de inocente y luego de soberano pendejo le pregunto
yo— para que ya no me desvele tanto y recupere tranquilidad en mis sueños
él— no, por la morra que se murió
Rapido me separe de él, él se rió
yo— vete al guevo, eso me pasa por andarte confesando mis temores
él— ....
La relación no va tan chida, estoy medio enfadado de llegar a la casa y me de besos de esos que das en las fiestas de coctel a la chuchis corcuera, putos besitos al aire, y yo que llego con el chile bien paradote..., no hay justicia

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